Hace algunos meses en una cena en el fantástico restaurante del Bal Hotel de Quintes en Asturias, pude probar este fantástico postre, la verdad que fue uno de los postres más deliciosos que he probado nunca en restaurantes.
El plato básicamente llevaba una cama de chocolate blanco derretido y encima 3 merenges con el interior de frambuesa dulce, no era mermelada ni franbuesas tal era como una especie de sirope de frambuesa acompañado de helado de pistacho y por encima frambuesas secas desechas.
Estaba buenisimo, si podía pecar por algo era por dulce...
